TODO MUERE

«Antonia no es policía ni criminalista. Nunca ha empuñado un arma ni llevado una placa, y, sin embargo, ha resuelto decenas de crímenes». Esta era la carta de presentación de un personaje, para mí único dentro de la literatura española y mas concretamente del thriller español.

Lejos queda su aparición en 2018. Seis años después y cinco libros mediante, en Todo Muere el autor, la editorial y el marketing nos cuentan que se cierra la saga. Pero no, debía de haberse llamado Todos mienten.

Nada de circulo cerrado, más bien pendiente. Gómez-Jurado escribirá nuevas obras, con nuevos personajes, tal vez magníficos. Nos seguirá conquistando con su humor tan peculiar, con esos chistes malos, esos giros, las comparaciones como mínimo singulares, que te sacan una sonrisa dentro del «drama».

Si no te gustó Reina Roja o Todo arde, no pierdas el tiempo con esta novela, porque tampoco te gustará. Y desde luego, el personaje de Aura, no es comparable con el de Antonia Scott. 

El libro es lo que es: entretenimiento puro y duro. No esperes literatura de altos vuelos. Es el estilo tan peculiar de narrar de Juan Gómez-Jurado. Aunque en esta novela hay alguna descripción más completa que en novelas anteriores, menos publicidad encubierta, pero sigue teniendo momentos inverosímiles, que llegan a ser de relleno, y que no aportan, más bien, rompen el relato, lo ensucian. Con 300 páginas cuenta lo mismo y mas claro. Exceso de palabras, pensamientos y digresiones que solo ralentizan una historia de por sí bastante sencilla y básica, con pocos giros reales, algo común, en mayor o menor medida, a toda la saga, la idea de base que no es nueva: los poderes en la sombra, y poco más.

Por ciento, las notas finales del autor no convencen, y eso que yo he sido incondicional del autor, aunque cada vez menos.

En resumen, Todo muere es una novela que en realidad no acaba nada, que deja abierta la posibilidad de la continuación cuando al autor le venga bien, con un falso final abierto e insatisfactorio, incluida la esperada y muy breve aparición de ciertos personajes  Además de los detalles ya mencionados. Quizá satisfaga a incondicionales del autor y su obra... O no.

¡Ay Antonia!, cuánto te echo de menos. Menos mal que nos queda Mari Paz.

No faltan referencias literarias como Hansel y Gretel y sus miguitas de pan, La isla del tesoro, Roald Dhal. Cinematográficas: El estanque dorado, Halloween, Gladiator

De entre las musicales, Time Is on My Side, El tiempo está de mi lado. Versión de 1964 por los Rolling Stones, la primera, con intro de órgano, en su disco 12 × 05